CONTRA EL LIBELO DE CALVINO (CONTRA LIBELLUM CALVINI) Tras la muerte de Miguel Servet, humanista, teólogo y médico español nacido en Aragón (Villanueva de Sijena, 1511), en la hoguera de Ginebra (1553), un reducido grupo de intelectuales europeos se rebelaron contra lo que consideraban una práctica contraria a los más elementales principios evangélicos: la persecución de los herejes y su condena a la pena capital. Entre estos humanistas destaca Sebastián Castellio, para quien la muerte de Miguel Servet deslegitimó el modelo político y social liderado por Juan Calvino en Ginebra. La voz de Castellio, aun enterrada en la historia por el protagonismo de otros humanistas del siglo XVI, surge, a raíz de la muerte de Servet, como una chispa en la conciencia oscura de un siglo terrible para proclamar, en su obra Contra el libelo de Calvino (1554), una de las frases más clarividentes de la historia de las ideas: “Matar a un hombre para defender una doctrina no es defender una doctrina. Es matar a un hombre…” |
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